Una nueva era se ha abierto en la Unión Europea (UE). Y, por tanto, en España. Las subidas de los tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE) y las nuevas reglas fiscales amenazan las políticas sociales de los gobiernos para luchar contra el impacto de la inflación y las consecuencias de la guerra de Ucrania. La combinación del encarecimiento de la financiación para luchar contra la subida de precios y la vuelta a normas de control presupuestario para reducir los endeudamientos atan las 'manos' de los ejecutivos europeos para diseñar medidas que alivien el daño que sufren los ingresos reales de las familias.