“El feminismo es una casa de muertas”. Así de contundente es una de las primeras frases que el lector -o, casi seguro, lectora- se encuentra en el libro 'El museo de las ausentes' (Paidós, 2024), de la investigadora Amanda Mauri (Barcelona, 1995). El manuscrito no es el enésimo texto sobre teoría feminista, no es una elegía por lo mal que estamos ni un ejercicio utópico por lo que podría ser. Es un ensayo sobre un tema difícil: el duelo y el uso político que se le da a las muertas.