Las muertes en accidentes de trabajo son abrumadoras, en España más de 41.000 personas en las últimas tres décadas, pero solo suponen una pequeña parte de quienes fallecen a causa del trabajo. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha publicado un estudio que cifra en casi tres millones las personas que mueren cada año por motivos laborales en el mundo, de las que 330.000 trabajadores se dejaron la vida en accidentes, los siniestros más visibles. La gran mayoría, el 89%, un total de 2,6 millones de personas fallecen cada año por enfermedades motivadas por su ocupación, como enfermedades circulatorias y cánceres, que en la mayoría de ocasiones no se registran ni vinculan a su origen laboral.