La crisis del coronavirus ha demostrado dos cosas en el sistema sanitario español, cuyas competencias están en las comunidades autónomas: se ha comportado por encima de sus posibilidades, que venían lastradas por problemas estructurales relacionados con los recortes.
"El sistema de salud español ha estado ofreciendo buenos resultados de salud a pesar del nivel relativamente bajo de inversiones", afirma la Comisión Europea en su informe sobre España elaborado por el Semestre Europeo en su Paquete de Primavera: "Sin embargo, el estallido de la pandemia del COVID-19 ha ejercido una presión sin precedentes sobre el sistema y ha revelado su vulnerabilidad a las crisis".