Las protestas contra el racismo desencadenadas tras la muerte de Gorge Floyd, que falleció el 25 mayo tras ser asfixiado por un agente de policía de Minneapolis, no solo han abierto el debate del racismo institucional y la necesidad de reformas policiales, sino que también está teniendo consecuencias en el periodismo, la televisión y el mundo empresarial. Periodistas han dimitido por titulares escandalosos y empresarios han renunciado por declaraciones inapropiadas y para dar paso a personas negras en juntas directivas. En la televisión, algunas plataformas han optado por eliminar contenidos acusados de exaltar el racismo y la violencia policial.
James Bennet, antiguo jefe de la sección de opinión de The New York Times dimitió el domingo pasado después de disculparse públicamente por publicar una polémica columna de opinión del senador republicano Tom Cotton titulada 'envíen las tropas' –titular elegido por el periódico, no por el senador–.