Más de 1.000 ataques confirmados a centros de salud, ambulancias y otros aspectos de la atención médica en Ucrania que dificultan que decenas de miles de personas puedan acceder a esta asistencia e incrementan los riesgos de enfermedad y muerte. Es el "sombrío hito" que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se acaba de alcanzar 15 meses después del estallido de la guerra: se trata de la cifra más alta que la agencia de Naciones Unidas ha registrado en una emergencia humanitaria.