Las propuestas económicas del líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, en el debate de su investidura fueron una amalgama de seguidismo a las políticas del Gobierno de coalición, bulos y catastrofismo en contra de los datos. La última aceptación de una de las decisiones del Ejecutivo más criticadas por la derecha durante años fue la promesa de situar el salario mínimo en el 60% del sueldo medio. Un objetivo que precisamente se ha alcanzado tras un aumento histórico de casi el 50% desde junio de 2018 hasta agosto de 2023, el periodo en el que ha gobernado Pedro Sánchez.