El Ministerio de Transportes y Agenda Urbana plantea beneficios fiscales para propietarios que limiten el precio del alquiler como fórmula para moderar los precios, desmarcándose así de la regulación comprometida en el pacto de Gobierno y en el posterior acuerdo de los PGE, según fuentes cercanas a la negociación.
Aunque no es exactamente igual, la medida recuerda al Programa de Arrendamiento Accesible de Portugal, una plan que concede ventajas fiscales a propietarios que ofrezcan rentas por debajo del 20% del mercado. Este programa es de adhesión voluntaria para propietarios y solo se pueden acoger a él inquilinos que no superen los 35.000 euros de renta anual (45.000 familiar).