El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció un nuevo plan de estímulo de 1,9 billones de euros cuando llegó a la Casa Blanca, tras el plan de 1,2 billones de Donald Trump. En Europa –con 100 millones más de habitantes– sólo España se atrevió a pedir 1,5 billones, y al final, en verano de 2020, los líderes de la UE pactaron 750.000 millones (800.000 en precios actuales). Pero cada vez cunden más dos preocupaciones: si acaso, en la línea de lo decidido por Biden, harán falta más estímulos; y que aún ni siquiera se han puesto en marcha los fondos europeos que, además, su tramitación se ha detenido por las dudas del Tribunal Constitucional alemán.